segunda-feira, outubro 31, 2005

Odio a Disney

Desde niña he pensado que todos los finales deberían de ser felices, ahora, cuando algo no termina bien, me obsesiona y da vueltas por mi cabeza, día y noche, picoteándome, sin dejarme descansar. Hoy aprendí que eso de los finales felices son patrañas, si ha habido una mala despedida en mi vida, no tiene remedio, además si no se termina bien, a veces resulta más interesante. Así que, a todos los perros bastardos con los que no he tenido un buen final,les digo esto: ¡váyanse al diablo y ojalá que les vaya bonito!

3 comentários:

Anônimo disse...

mujer... al fin y al cabo mujer!

G Velázquez disse...
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G Velázquez disse...

Ja, como si ustedes los hombres no se creyeran los principes azules, guapos, inteligentes, incomparables... si vieran un pedacito de realidad...
Además, los hombres últimamente, a las pruebas me remito, son unas nenitas peor que las mismísimas princesas de Disney.
¿o no, o no?

...todos tienen cola que les pisen, no seas sexista... a ver a ver, muy machín para escribir un comentario, pues ¡pon tu nombre!